Kirchnerismo de la tercera edad
Jubilados crearon una agrupación K, Fénix
“Somos trabajadores, militantes sindicales, castigados por ese motivo en diversas oportunidades y por los distintos gobiernos militares y seudo civiles que asolaron a nuestro país a partir de 1955. Sufrimos cárceles, discriminaciones, despidos y así llegamos descreídos y con las esperanzas perdidas a nuestra vejez... Las opciones son dos: apoyar el modelo nacional y popular, empujando corriendo los limites de lo posible o nos ponemos al lado de los miserables intereses de aquellos a quienes este modelo perjudica”.
02.08.2011 | 10:38
Paraná- Pasan largamente los 70 años y tienen toda una vida cautivados por la política, con más o menos intensidad, según los tiempos. Los integrantes de la Agrupación Fénix, en este presente, han encontrado un motivo para reunirse y recuperar la dinámica de la militancia ante el contexto electoral.
“Pensamos que todavía podemos hacer algo. Y este modelo que tenemos hoy, que expresa Cristina, es lo más parecido que hemos visto a lo que hemos luchado toda la vida”, explicó Carlos Pastori que tiene una larga historia como dirigente sindical, primero como ferroviario, luego desde el movimiento cooperativo y las organizaciones de pequeñas y medianas empresas. Siempre, vinculado al Partido Comunista.
No es muy distinta la historia de Pascual Fernando Glauser y Ricardo Ángel Zapata, también integrantes de la agrupación.
En el 2003, antes de escuchar el discurso de asunción de Néstor Kirchner, votaron algunos a Elisa Carrió (“Tenía un programa interesante para las Pymes que recuerdo que promovía Rubén Lo Vuolo”, recuerda Pastori), otros, a los candidatos de Izquierda Unida. Desde entonces han seguido el proceso kirchnerista de perfil, sumándose a alguna que otra iniciativa, pero ante el contexto electoral y con la opción de la reelección de Cristina Fernández de Kirchner, entendieron que era tiempo de organizarse y militar la boleta oficialista en todos los órdenes.
“Hay que profundizar este modelo, hay que empujarlo, corriendo los limites de lo posible”, dijo Pastori y Zapata subrayó que se trata de “crear conciencia, de hacer entender que si se sigue desarrollando este modelo nos van a conducir a un proceso de liberación”, sostuvo.
“Sabemos que si esto se profundiza, se contemplará el problema económico, el problema social, se logrará la independencia económica, la soberanía política. Este es el comienzo y nos preocupa que haya movilización, que participe la gente, para lograr la fuerza que se logra solo con la movilización popular de la clase obrera, de la juventud”, manifestó Zapata.
–¿Por qué eligen no sumarse al Partido Justicialista?
–Yo soy comunista. Y muchos de nosotros tenemos desacuerdos con el accionar de algunos sectores del PJ. Somos marxistas y creo que a esta altura ya nos vamos a morir así no más.
Declaración.
Con la fundación de la agrupación Fénix, sus integrantes dieron a difusión un documento político en el que se presentan como “trabajadores, militantes sindicales, castigados por ese motivo en diversas oportunidades y por los distintos gobiernos militares y seudo civiles que asolaron a nuestro país a partir de 1955. Sufrimos cárceles, discriminaciones, despidos y así llegamos descreídos y con las esperanzas perdidas a nuestra vejez”.
Remarcan que “un nuevo modelo nacional y popular se insinúa a partir de 2003”. “Se hace realidad de la mano de Néstor Kirchner y continúa con Cristina. Surge nuevamente aquel viejo sueño de nuestra juventud: ‘otro país es posible’”, afirmaron. “Todavía podemos hacer algo para volver a sentirnos completamente vivos”, dijeron.
Según lo entienden este modelo “recupera la esperanza” porque “derogó las leyes de la impunidad castigando a los genocidas, porque rechazó el ALCA e intensificó las relaciones políticas, culturales, económicas y comerciales con los países sudamericanos, porque recuperó el manejo de las políticas económicas declarándonos autónomos frente al FMI y sus planes de ajuste; porque preserva la soberanía estatal frente a las corporaciones empresarias y porque quebró el monopolio discursivo único neoliberal”.
Consideran necesario avanzar en “una mayor y mejor distribución de las riquezas para lo cual es necesaria una modificación del sistema impositivo, para que paguen más los que más tienen y así poder concretar también nuestra vieja aspiración del 82% móvil”.
Pretenden que se resuelva “el déficit habitacional; el reemplazo de la aún vigente ley de entidades financieras por una ley de servicios financieros que apunte a democratizar el crédito y orientarlo a la producción, una ley de desarrollo productivo para las micros y pequeñas empresas que son rápidas generadoras de empleo”, entre otras consignas.
Opciones.
En el documento, la agrupación convoca a “la unidad de acción para conseguir” lo que reclaman como políticas de Estado. “Por eso llamamos no sólo a otros jubilados si no también a los jóvenes a integrarse a esta cruzada porque tenemos la plena convicción de que no hay una tercera alternativa”.
Las opciones, para estos militantes, será o “apoyar el modelo nacional y popular, empujando corriendo los limites de lo posible o nos ponemos al lado de los miserables intereses de aquellos a quienes este modelo perjudica”.
Fuente: El Diario
“Pensamos que todavía podemos hacer algo. Y este modelo que tenemos hoy, que expresa Cristina, es lo más parecido que hemos visto a lo que hemos luchado toda la vida”, explicó Carlos Pastori que tiene una larga historia como dirigente sindical, primero como ferroviario, luego desde el movimiento cooperativo y las organizaciones de pequeñas y medianas empresas. Siempre, vinculado al Partido Comunista.
No es muy distinta la historia de Pascual Fernando Glauser y Ricardo Ángel Zapata, también integrantes de la agrupación.
En el 2003, antes de escuchar el discurso de asunción de Néstor Kirchner, votaron algunos a Elisa Carrió (“Tenía un programa interesante para las Pymes que recuerdo que promovía Rubén Lo Vuolo”, recuerda Pastori), otros, a los candidatos de Izquierda Unida. Desde entonces han seguido el proceso kirchnerista de perfil, sumándose a alguna que otra iniciativa, pero ante el contexto electoral y con la opción de la reelección de Cristina Fernández de Kirchner, entendieron que era tiempo de organizarse y militar la boleta oficialista en todos los órdenes.
“Hay que profundizar este modelo, hay que empujarlo, corriendo los limites de lo posible”, dijo Pastori y Zapata subrayó que se trata de “crear conciencia, de hacer entender que si se sigue desarrollando este modelo nos van a conducir a un proceso de liberación”, sostuvo.
“Sabemos que si esto se profundiza, se contemplará el problema económico, el problema social, se logrará la independencia económica, la soberanía política. Este es el comienzo y nos preocupa que haya movilización, que participe la gente, para lograr la fuerza que se logra solo con la movilización popular de la clase obrera, de la juventud”, manifestó Zapata.
–¿Por qué eligen no sumarse al Partido Justicialista?
–Yo soy comunista. Y muchos de nosotros tenemos desacuerdos con el accionar de algunos sectores del PJ. Somos marxistas y creo que a esta altura ya nos vamos a morir así no más.
Declaración.
Con la fundación de la agrupación Fénix, sus integrantes dieron a difusión un documento político en el que se presentan como “trabajadores, militantes sindicales, castigados por ese motivo en diversas oportunidades y por los distintos gobiernos militares y seudo civiles que asolaron a nuestro país a partir de 1955. Sufrimos cárceles, discriminaciones, despidos y así llegamos descreídos y con las esperanzas perdidas a nuestra vejez”.
Remarcan que “un nuevo modelo nacional y popular se insinúa a partir de 2003”. “Se hace realidad de la mano de Néstor Kirchner y continúa con Cristina. Surge nuevamente aquel viejo sueño de nuestra juventud: ‘otro país es posible’”, afirmaron. “Todavía podemos hacer algo para volver a sentirnos completamente vivos”, dijeron.
Según lo entienden este modelo “recupera la esperanza” porque “derogó las leyes de la impunidad castigando a los genocidas, porque rechazó el ALCA e intensificó las relaciones políticas, culturales, económicas y comerciales con los países sudamericanos, porque recuperó el manejo de las políticas económicas declarándonos autónomos frente al FMI y sus planes de ajuste; porque preserva la soberanía estatal frente a las corporaciones empresarias y porque quebró el monopolio discursivo único neoliberal”.
Consideran necesario avanzar en “una mayor y mejor distribución de las riquezas para lo cual es necesaria una modificación del sistema impositivo, para que paguen más los que más tienen y así poder concretar también nuestra vieja aspiración del 82% móvil”.
Pretenden que se resuelva “el déficit habitacional; el reemplazo de la aún vigente ley de entidades financieras por una ley de servicios financieros que apunte a democratizar el crédito y orientarlo a la producción, una ley de desarrollo productivo para las micros y pequeñas empresas que son rápidas generadoras de empleo”, entre otras consignas.
Opciones.
En el documento, la agrupación convoca a “la unidad de acción para conseguir” lo que reclaman como políticas de Estado. “Por eso llamamos no sólo a otros jubilados si no también a los jóvenes a integrarse a esta cruzada porque tenemos la plena convicción de que no hay una tercera alternativa”.
Las opciones, para estos militantes, será o “apoyar el modelo nacional y popular, empujando corriendo los limites de lo posible o nos ponemos al lado de los miserables intereses de aquellos a quienes este modelo perjudica”.
Fuente: El Diario