Frigerio agotó el crédito con el PJ, ¿habrá reforma política?

La cordial relación que hasta el momento venía manteniendo el gobierno provincial con el Partido Justicialista (PJ) entrerriano parece haber llegado a su fin. El peronismo se muestra renuente a debatir la Reforma Política impulsada por Rogelio Frigerio, por diversos motivos que van desde el contexto hasta el trato recibido en el marco de la presentación de la norma, la semana pasada.

La iniciativa impulsada por la Casa Gris es una promesa de campaña y estuvo siempre en la plataforma de Juntos por Entre Ríos, pero parece haberse instalado en un escenario en el que el debate pasa por otro lado. Las miradas están puestas casi exclusivamente en el Congreso, donde el oficialismo intenta negociar a contrarreloj la aprobación de la Ley Bases. En esos 232 artículos versan sustanciales modificaciones a la vida cotidiana de los argentinos, además de trazarse un plan económico de achique del Estado con una reforma laboral que pretende flexibilizar las condiciones de trabajo. Si a eso se le suma la crisis social y económica actual, entonces la discusión por la forma en la que se vota parece quedar chico.

La foto de Frigerio presentando la Reforma Política en el Centro Provincial de Convenciones (CPC) tuvo como principal objetivo volver a poner al mandatario en el centro de la escena, luego de varias semanas donde su imagen ha quedado relegada por la falta de recursos para emprender proyectos significativos en la provincia. El exministro le prende velas a la Ley Bases para que lleguen fondos frescos con el -posiblemente reinstalado- Impuesto a las Ganancias y mientras intenta contener el frente interno con los sindicatos y mostrarse activo a la vez.
 

El peronismo, por su lado, se ha mostrado colaborativo en estos últimos cinco meses. Ha acompañado normas que ha impulsado por Poder Ejecutivo -cambios en los ministerios, emergencias- y ha intentado no quedar como una oposición poco dialoguista. Sin embargo, lo del último martes parece ser un antes y un después en esa buena sintonía que se venía manejando. El crédito parece haberse agotado y peligra entonces una reforma que el mismo PJ impulsó alguna vez, pero que ahora no estaría dispuesto a discutir.

Fuentes cercanas al bloque de Más para Entre Ríos se mostraron sorprendidos por la ausencia de un proyecto en la presentación. “No había nada, no había una carpeta, no había tres líneas, algún antecedente. Fue una llamada, una convocatoria, un anuncio de Boleta Única, una foto, discursos y Frigerio yéndose antes”, lanzaron. Y agregaron: “Está tan limitado por el gobierno nacional que se quedó sin agenda. Nunca se imaginó que él iba a apoyar como aliado y no le iban a devolver el favor. Lo de hoy fue una maniobra para aparecer”.

Ningún diputado peronista hizo uso de la palabra en el CPC, excepto Laura Stratta. La jefa de la primera oposición en la Cámara Baja habló de trabajar “articuladamente”, pero nada más. Fue, literal, menos de un minuto. Cuando el gobernador se levantó para irse -poco antes de que concluya el cónclave-, la mayoría de los legisladores del PJ hizo lo propio. Los senadores, en efecto, no habían entrado, disconformes con la organización y por creer que estaban relegados en la mesa, con un lugar no acorde a su investidura.

Horas después, llegaría un comunicado del peronismo provincial, donde Cáceres hablaría en duros términos de la presentación. Dijo que fue “circo” y se mostró totalmente en contra de debatir el proyecto en el actual contexto nacional. El escrito reabrió la incógnita sobre si habrá finalmente o no acompañamiento a la iniciativa oficial, en un marco donde todo voto cuenta y en el que el justicialismo, con mayoría en el Senado, puede empantanar el tratamiento.