ESTAFA MUNDIAL CON MILEI
Karina en las negociaciones con los empresarios cripto antes de que estalle $LIBRA
Karina Milei fue el contacto principal de Mauricio Novelli y los otros allegados a la Presidencia que acercaron a Hayden Davis, el creador del token fallido. El contrato que habría firmado el Presidente, Javier Milei, había sido armado por ella.
08.03.2025 | 19:12
Por Hugo Alconada Mon
La secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, protagonizó las negociaciones que llevaron a la firma de una “carta de intención” con la plataforma Cube Exchange, a mediados de octubre, y un mes después discutió el borrador de un “acuerdo de asociación” con Hayden Mark Davis, el “empresario” detrás de la criptomoneda $LIBRA, confirmaron tres fuentes estadounidenses y argentinas con conocimiento directo de ambas tratativas a LA NACION.
Karina Milei asumió la revisión final de ambos documentos, antes de que pasaran a las manos del Presidente para su firma. Y asumió ese rol apoyada en tres allegados conocidos –Mauricio Novelli, Terrones Godoy y Sergio Morales- y otro que permanece en las sombras, temeroso de una citación judicial: Ariel Parkinson.
“Las discusiones previas a la firma fueron con Karina, y sólo después llegó el Presidente”, detalló una fuente, en tanto que otra fuente trazó un aparente reparto de funciones entre los colaboradores externos. “Novelli era o se mostraba más cercano a Milei; Terrones Godoy, a Karina”, detalló.
Los registros de ingresos a la Casa Rosada y Quinta de Olivos muestran, en ese sentido, una disparidad entre Novelli y Terrones Godoy. El primero entró diez veces a la Casa de Gobierno durante 2024 (8 de enero, 5 de abril, 6 y 11 de junio, 16 de julio, 1 de agosto, 20 de septiembre –en dos ocasiones-, 1 y 21 de noviembre) y otras dos a la residencia (4 de octubre y 10 de noviembre). A veces ingresó solo y en otras junto a Terrones Godoy, Davis o a empresarios.
Terrones Godoy registra menos interacción formal con el poder. Apenas dos visitas a la Rosada y en ambas ocasiones con Novelli. La primera, el 11 de junio, cuando también entró Sergio Morales a la sede del Gobierno; la segunda, el 16 de julio, con los CEO de Cube Exchange, Bartosz Lipinsk, y de Kelsier Ventures, Hayden Davis, quien por entonces asesoraba en temas de “marketing” en la Argentina a Cube Exchange.
Novelli, Terrones Godoy, Davis y Lipinsk dejaron registros de su paso por los pasillos oficiales. Se fotografiaron dentro de la Casa Rosada y en la entrada del Banco Central (BCRA) tras una recorrida en la que participó otro eslabón poco conocido detrás de la trama $LIBRA, según reconstruyó LA NACION. Se trata del COO –o responsable máximo de operaciones- de Tech Forum, Ariel Parkinson.
Novelli, Terrones Godoy y Parkinson también buscaron promocionar Tech Forum, como un evento de avanzada, con entrevistas como la que concedieron a la señal TN de noticias, en comunicación permanente con la Casa Rosada.
“Karina, Manuel [Terrones Godoy] y Sergio [Morales] eran un todo unido, y Ariel [Parkinson] hacía de nexo y ahora tiene mucho miedo”, detalló a LA NACION una fuente al tanto de las deliberaciones internas de ese grupo, que al igual que Hayden y Novelli decidieron cerrar sus teléfonos desde que estalló el escándalo.
LA NACION procuró consultar a Javier y Karina Milei, a Novelli, Davis, Terrones Godoy, Morales y Parkinson, pero al cierre de esta edición no respondieron los mensajes, como también sus voceros o abogados.
¿Quién es Morales? Socio de Terrones Godoy en la firma City Entertainment SRL, este viernes presentó su renuncia al cargo de asesor en criptoactivos de la Comisión Nacional de Valores (CNV). Y antes, se presentaba como “Coordinador de Asesoramiento Técnico de la Presidencia” en al menos un evento que se desarrolló el 31 de julio, en el que también participó Charles Hoskinson, el billonario fundador de la criptomoneda Cardano.
Pedidos de dinero
Sólo horas después del lanzamiento y colapso de $LIBRA, Hoskinson difundió un video en el que acusó a los organizadores de Tech Forum –es decir, Novelli y Terrones Godoy– de exigirle dinero a cambio de una reunión con Milei. Aclaró que se negó a pagarles porque sería punible por la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA, por sus siglas en inglés).
No fue el único empresario que afrontó esas exigencias. Otro asistente al Tech Forum sostuvo que Novelli le ofreció una reunión con el Presidente si firmaba un contrato de US$ 500.000 por unos supuestos “servicios de consultoría”, según consta en la copia de ese documento al que accedió The New York Times.
Milei rechazó la publicación de The New York Times en una de las dos únicas entrevistas que concedió desde que estalló el escándalo, el 14 de febrero. “Se trata de chimentos de peluquería desesperados. Es un problema de terceros, no es problema mío ni de mis funcionarios”, dijo el Presidente, que se negó a criticar o desacreditar a Novelli, Terrones Godoy y Davis, y evitó aludir a Morales.
Sin embargo, también el cofundador de Ethereum, Vitalik Buterin, intentó reunirse con Milei durante la campaña presidencial de 2023 –en la que Karina Milei asumió las riendas de la recaudación electoral– y tras su ingreso a la Casa Rosada. No tuvo éxito. El desarrollador argentino Santiago Siri sólo logró concertar un encuentro con el jefe del Consejo de Asesores Económicos de la Presidencia, Demián Reidel. Y otro referente argentino redobló el esfuerzo, pero sólo llegó hasta Karina Milei, según reconstruyó LA NACION, que lo derivó con Novelli. Hasta ahí llegó. La reunión no se concretó.
LA NACION contactó al equipo de Buterin, para consultarle de manera directa sobre su intento fallido por reunirse con Milei. ¿Respuesta? “Nosotros continuamos enfocados en el desarrollo de un ecosistema [cripto] y la investigación [asociada]”, replicó su vocero Joseph Schweitzer. “Dicho eso, aplaudimos su trabajo y le deseamos una labor exitosa”.
A los 31 años, con un patrimonio valuado en más de 600 millones de dólares y convertido en un referente global de los desarrollos informáticos de vanguardia, el ruso-canadiense Buterin no logró superar los filtros de la Casa Rosada, como sí lo logró Davis, un estadounidense de 28 años que era un desconocido en las grandes ligas.
Pero el propio Davis dio su versión sobre cómo y por qué llegó a interactuar con el poder en la Argentina. “Podemos hacer que Milei tuitee, haga reuniones en persona y haga una promoción”, les escribió a fines de 2024 y principios de 2025, a expertos en finanzas y ejecutivos de inversiones cripto con los que sondeaba negocios. “Yo controlo a ese nigga”, añadió, usando la expresión con la que supremacistas blancos aluden en Estados Unidos a personas afroamericanas o de otros orígenes que están sujetas casi a la servidumbre. “Le envío $$ a su hermana [por Karina] y él firma lo que digo y hace lo que quiero. Una locura”.
Karina Milei asumió la revisión final de ambos documentos, antes de que pasaran a las manos del Presidente para su firma. Y asumió ese rol apoyada en tres allegados conocidos –Mauricio Novelli, Terrones Godoy y Sergio Morales- y otro que permanece en las sombras, temeroso de una citación judicial: Ariel Parkinson.
“Las discusiones previas a la firma fueron con Karina, y sólo después llegó el Presidente”, detalló una fuente, en tanto que otra fuente trazó un aparente reparto de funciones entre los colaboradores externos. “Novelli era o se mostraba más cercano a Milei; Terrones Godoy, a Karina”, detalló.
Los registros de ingresos a la Casa Rosada y Quinta de Olivos muestran, en ese sentido, una disparidad entre Novelli y Terrones Godoy. El primero entró diez veces a la Casa de Gobierno durante 2024 (8 de enero, 5 de abril, 6 y 11 de junio, 16 de julio, 1 de agosto, 20 de septiembre –en dos ocasiones-, 1 y 21 de noviembre) y otras dos a la residencia (4 de octubre y 10 de noviembre). A veces ingresó solo y en otras junto a Terrones Godoy, Davis o a empresarios.
Terrones Godoy registra menos interacción formal con el poder. Apenas dos visitas a la Rosada y en ambas ocasiones con Novelli. La primera, el 11 de junio, cuando también entró Sergio Morales a la sede del Gobierno; la segunda, el 16 de julio, con los CEO de Cube Exchange, Bartosz Lipinsk, y de Kelsier Ventures, Hayden Davis, quien por entonces asesoraba en temas de “marketing” en la Argentina a Cube Exchange.
Novelli, Terrones Godoy, Davis y Lipinsk dejaron registros de su paso por los pasillos oficiales. Se fotografiaron dentro de la Casa Rosada y en la entrada del Banco Central (BCRA) tras una recorrida en la que participó otro eslabón poco conocido detrás de la trama $LIBRA, según reconstruyó LA NACION. Se trata del COO –o responsable máximo de operaciones- de Tech Forum, Ariel Parkinson.
Novelli, Terrones Godoy y Parkinson también buscaron promocionar Tech Forum, como un evento de avanzada, con entrevistas como la que concedieron a la señal TN de noticias, en comunicación permanente con la Casa Rosada.
“Karina, Manuel [Terrones Godoy] y Sergio [Morales] eran un todo unido, y Ariel [Parkinson] hacía de nexo y ahora tiene mucho miedo”, detalló a LA NACION una fuente al tanto de las deliberaciones internas de ese grupo, que al igual que Hayden y Novelli decidieron cerrar sus teléfonos desde que estalló el escándalo.
LA NACION procuró consultar a Javier y Karina Milei, a Novelli, Davis, Terrones Godoy, Morales y Parkinson, pero al cierre de esta edición no respondieron los mensajes, como también sus voceros o abogados.
¿Quién es Morales? Socio de Terrones Godoy en la firma City Entertainment SRL, este viernes presentó su renuncia al cargo de asesor en criptoactivos de la Comisión Nacional de Valores (CNV). Y antes, se presentaba como “Coordinador de Asesoramiento Técnico de la Presidencia” en al menos un evento que se desarrolló el 31 de julio, en el que también participó Charles Hoskinson, el billonario fundador de la criptomoneda Cardano.
Pedidos de dinero
Sólo horas después del lanzamiento y colapso de $LIBRA, Hoskinson difundió un video en el que acusó a los organizadores de Tech Forum –es decir, Novelli y Terrones Godoy– de exigirle dinero a cambio de una reunión con Milei. Aclaró que se negó a pagarles porque sería punible por la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA, por sus siglas en inglés).
No fue el único empresario que afrontó esas exigencias. Otro asistente al Tech Forum sostuvo que Novelli le ofreció una reunión con el Presidente si firmaba un contrato de US$ 500.000 por unos supuestos “servicios de consultoría”, según consta en la copia de ese documento al que accedió The New York Times.
Milei rechazó la publicación de The New York Times en una de las dos únicas entrevistas que concedió desde que estalló el escándalo, el 14 de febrero. “Se trata de chimentos de peluquería desesperados. Es un problema de terceros, no es problema mío ni de mis funcionarios”, dijo el Presidente, que se negó a criticar o desacreditar a Novelli, Terrones Godoy y Davis, y evitó aludir a Morales.
Sin embargo, también el cofundador de Ethereum, Vitalik Buterin, intentó reunirse con Milei durante la campaña presidencial de 2023 –en la que Karina Milei asumió las riendas de la recaudación electoral– y tras su ingreso a la Casa Rosada. No tuvo éxito. El desarrollador argentino Santiago Siri sólo logró concertar un encuentro con el jefe del Consejo de Asesores Económicos de la Presidencia, Demián Reidel. Y otro referente argentino redobló el esfuerzo, pero sólo llegó hasta Karina Milei, según reconstruyó LA NACION, que lo derivó con Novelli. Hasta ahí llegó. La reunión no se concretó.
LA NACION contactó al equipo de Buterin, para consultarle de manera directa sobre su intento fallido por reunirse con Milei. ¿Respuesta? “Nosotros continuamos enfocados en el desarrollo de un ecosistema [cripto] y la investigación [asociada]”, replicó su vocero Joseph Schweitzer. “Dicho eso, aplaudimos su trabajo y le deseamos una labor exitosa”.
A los 31 años, con un patrimonio valuado en más de 600 millones de dólares y convertido en un referente global de los desarrollos informáticos de vanguardia, el ruso-canadiense Buterin no logró superar los filtros de la Casa Rosada, como sí lo logró Davis, un estadounidense de 28 años que era un desconocido en las grandes ligas.
Pero el propio Davis dio su versión sobre cómo y por qué llegó a interactuar con el poder en la Argentina. “Podemos hacer que Milei tuitee, haga reuniones en persona y haga una promoción”, les escribió a fines de 2024 y principios de 2025, a expertos en finanzas y ejecutivos de inversiones cripto con los que sondeaba negocios. “Yo controlo a ese nigga”, añadió, usando la expresión con la que supremacistas blancos aluden en Estados Unidos a personas afroamericanas o de otros orígenes que están sujetas casi a la servidumbre. “Le envío $$ a su hermana [por Karina] y él firma lo que digo y hace lo que quiero. Una locura”.