Juliana Di Tullio, la diputada más linda del 2011
La diputada nacional Juliana Di Tullio (FPV – Buenos Aires) fue elegida Miss Parlamento 2011 por el sitio especializado en temas legislativos El Parlamentario. Di Tullio, quien durante el 2011 fue la presidenta de la comisión de Comercio que trató el tema de Papel Prensa, obtuvo el puesto de la diputada más linda, lugar que anteriormente había sido ocupado por Mariel Calchaquí en el 2010, o por Natalia Gambaro en el 2009.
06.02.2012 | 15:50
Dicen que la belleza de una mujer se mide con el número de miradas que atrapa. En otras palabras, le belleza está en los ojos de quien la mira. Miradas de aquí y allá; miradas curiosas, interesadas y hasta fascinadas por las apariencias femeninas. Si se mantiene esta idea, los encantos y el sex-appeal no son la excepción en la Cámara baja. Gracias a ello, algunas afortunadas diputadas consiguen acaparar la atención de gran parte del arsenal masculino con sólo pedir la palabra durante una sesión o desfilar entre las bancas y los pasillos del Congreso. En un Palacio Legislativo donde las paredes de mármol emanan perfume de mujer y la coquetería está siempre presente, Parlamentario realiza cada año una encuesta de verano entre asesores legislativos y periodistas parlamentarios, fuera de todo tinte político y acorde a los cánones de sensualidad que circulan hoy en día.
Así como el mundo entero elige cada año a su Miss Universo, en un certamen que corona tanto la belleza como la elegancia, la inteligencia, y el porte de las candidatas, este medio distingue a la diputada más linda de cada período de sesiones, que bien puede reunir estas virtudes. En el concurso internacional, las aspirantes provienen de todas partes del mundo; en la encuesta de Parlamentario, Buenos Aires y Tierra del Fuego son desde hace algunos años las provincias más ganadoras. Pero la afortunada es sólo una. ¿Quién es la más hermosa del recinto?
La más elogiada
Osciló entre el tercer y quinto puesto en las encuestas anteriores. Pero el año pasado, su gran trabajo al frente de la Comisión de Comercio y de la Ley sobre Papel Prensa le dieron un protagonismo especial no sólo por sus dotes como diputada. Juliana Di Tullio fue quien ganó esta vez el reinado de la Cámara por amplia mayoría, acompañada por su seriedad, su inteligencia y, sobre todo, su belleza y su elegancia a la orden del día. Parece que a la kirchnerista no le faltan armas de seducción, y así lo demostró durante los dos años que ya lleva ocupando su banca. No caben dudas: el bloque del Frente para la Victoria no se puede quejar. Sólo habrá que ver quién acompañará a la bonaerense en el podio de los más galanes de Diputados.
“Se fue Calchaquí, pero quedó Di Tullio”, comentan sin tapujos la mayoría de los periodistas acreditados y algunos asesores. Es que en la edición 2008 del concurso, la fueguina –ya con mandato cumplido- se convirtió en la gran triunfadora con la ayuda de sus llamativos ojos claros y un cuerpo escultural, a costa del rechazo de varias consultadas de su mismo sexo. En 2010, en cambio, la bonaerense Natalia Gambaro hizo valer sin objeciones el atractivo de su altura y de su largo cabello rubio. La peronista disidente obtuvo nada menos que la aceptación de sus pares femeninas, que no es poco.
Otras debilidades
Ser joven parece ser una de las ventajas más grandes para las candidatas a la hora de esta elección. En este sentido, una de las diputadas que se resiste a abandonar el ranking es Victoria Donda. La legisladora, siempre bien ubicada entre las más sexys, nunca dejó de llamar la atención con su escote y sus piernas, sobre todo durante el acto de reasunción de la presidenta Cristina Fernández en el Congreso. La integrante del FAP lució en aquella ocasión un corto y vistoso vestido rojo que dejaba al descubierto todos sus atributos. Ese tipo de vestimenta despertó admiraciones entre los más mujeriegos, pero también odios de la agrupación kirchnerista La Cámpora, que no ahorró insultos al momento de la jura de Donda. Más allá de esto, el corazón de la dipusex ya tiene dueño, y está en Barcelona.
Pero hay otras legisladoras que tampoco pasaron al olvido en esta edición del concurso. En el rubro tuvo gran éxito el Pro, de la mano de las siempre atractivas Paula Bertol y Gladys González: morocha por un lado, rubia por el otro.
Los periodistas tampoco dejaron de ocultar su admiración por la cordobesa Cecilia Merchán, a quienes la legisladora no negó una sola nota durante su mandato, que ya concluyó. Su ropa casual, su buena onda y un carácter descontracturado y simpático ayudaron a la hora de los votos y fueron algunos de los argumentos de sus admiradores.
Otra de las mujeres que despertó los más floreados elogios por parte de hombres -y también de mujeres- fue la novia del vicepresidente Amado Boudou, Agustina Kämpfer. A pesar de que la pelirroja periodista está fuera de concurso por no pertenecer al ámbito legislativo, bien podría haberle disputado a Di Tullio el primer lugar. En el rubro “nuevas bellezas”, algún que otro halago también fue para la mendocina electa por el Frente para la Victoria Anabel Fernández Sagasti. ¿Logrará ingresar al ranking en la próxima edición de Miss Parlamento?
Fuente: El Parlamentario
Así como el mundo entero elige cada año a su Miss Universo, en un certamen que corona tanto la belleza como la elegancia, la inteligencia, y el porte de las candidatas, este medio distingue a la diputada más linda de cada período de sesiones, que bien puede reunir estas virtudes. En el concurso internacional, las aspirantes provienen de todas partes del mundo; en la encuesta de Parlamentario, Buenos Aires y Tierra del Fuego son desde hace algunos años las provincias más ganadoras. Pero la afortunada es sólo una. ¿Quién es la más hermosa del recinto?
La más elogiada
Osciló entre el tercer y quinto puesto en las encuestas anteriores. Pero el año pasado, su gran trabajo al frente de la Comisión de Comercio y de la Ley sobre Papel Prensa le dieron un protagonismo especial no sólo por sus dotes como diputada. Juliana Di Tullio fue quien ganó esta vez el reinado de la Cámara por amplia mayoría, acompañada por su seriedad, su inteligencia y, sobre todo, su belleza y su elegancia a la orden del día. Parece que a la kirchnerista no le faltan armas de seducción, y así lo demostró durante los dos años que ya lleva ocupando su banca. No caben dudas: el bloque del Frente para la Victoria no se puede quejar. Sólo habrá que ver quién acompañará a la bonaerense en el podio de los más galanes de Diputados.
“Se fue Calchaquí, pero quedó Di Tullio”, comentan sin tapujos la mayoría de los periodistas acreditados y algunos asesores. Es que en la edición 2008 del concurso, la fueguina –ya con mandato cumplido- se convirtió en la gran triunfadora con la ayuda de sus llamativos ojos claros y un cuerpo escultural, a costa del rechazo de varias consultadas de su mismo sexo. En 2010, en cambio, la bonaerense Natalia Gambaro hizo valer sin objeciones el atractivo de su altura y de su largo cabello rubio. La peronista disidente obtuvo nada menos que la aceptación de sus pares femeninas, que no es poco.
Otras debilidades
Ser joven parece ser una de las ventajas más grandes para las candidatas a la hora de esta elección. En este sentido, una de las diputadas que se resiste a abandonar el ranking es Victoria Donda. La legisladora, siempre bien ubicada entre las más sexys, nunca dejó de llamar la atención con su escote y sus piernas, sobre todo durante el acto de reasunción de la presidenta Cristina Fernández en el Congreso. La integrante del FAP lució en aquella ocasión un corto y vistoso vestido rojo que dejaba al descubierto todos sus atributos. Ese tipo de vestimenta despertó admiraciones entre los más mujeriegos, pero también odios de la agrupación kirchnerista La Cámpora, que no ahorró insultos al momento de la jura de Donda. Más allá de esto, el corazón de la dipusex ya tiene dueño, y está en Barcelona.
Pero hay otras legisladoras que tampoco pasaron al olvido en esta edición del concurso. En el rubro tuvo gran éxito el Pro, de la mano de las siempre atractivas Paula Bertol y Gladys González: morocha por un lado, rubia por el otro.
Los periodistas tampoco dejaron de ocultar su admiración por la cordobesa Cecilia Merchán, a quienes la legisladora no negó una sola nota durante su mandato, que ya concluyó. Su ropa casual, su buena onda y un carácter descontracturado y simpático ayudaron a la hora de los votos y fueron algunos de los argumentos de sus admiradores.
Otra de las mujeres que despertó los más floreados elogios por parte de hombres -y también de mujeres- fue la novia del vicepresidente Amado Boudou, Agustina Kämpfer. A pesar de que la pelirroja periodista está fuera de concurso por no pertenecer al ámbito legislativo, bien podría haberle disputado a Di Tullio el primer lugar. En el rubro “nuevas bellezas”, algún que otro halago también fue para la mendocina electa por el Frente para la Victoria Anabel Fernández Sagasti. ¿Logrará ingresar al ranking en la próxima edición de Miss Parlamento?
Fuente: El Parlamentario