Cruce por el 24 de marzo
El Socialismo contestó a las acusaciones de Román y Martínez Paiva
El Socialismo uruguayense salió a contestarles a César Román y a Carlos Martínez Paiva, querellantes en la causa en contra de Álbano Harguindeguy, quienes criticaron en duros términos al partido de la rosa y el puño. A continuación, su respuesta.
28.03.2012 | 18:25
"Concretamente, se acusa a los socialistas de “ejercitar una práctica facciosa, oportunismo político, cinismo histórico y atroz falta de solidaridad” (sic).
¿Cuál es la fundamentación de la los firmantes de la carta para tal acusación? El colaboracionismo de un dirigente de uno de los grupos en los que se hallaba dividido el Partido Socialista durante esa época. Se omite, por ejemplo, la trayectoria de dirigentes como Alfredo Bravo, víctima de la dictadura y fundador de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, o el rechazo tajante al golpe de Guillermo Estévez Boero –cuando otros sectores de la izquierda lo alentaban–, entre tantos otros socialistas que honraron la defensa de la democracia y los derechos humanos. Mencionar un caso y no los otros es un uso sesgado de una verdad histórica, valorada de manera tendenciosa y calumniante.
El Partido Socialista de la Argentina se reunificó precisamente sobre la base de dirigentes y líneas como la de estos referentes mencionados, rectificando las distorsiones y errores cometidos, sin justificar equivocaciones sino cambiando el rumbo.
Esto también es parte de la historia, como lo es que otras fuerzas políticas, entre ellas las mayoritarias, que hoy repudian junto a nosotros el terrorismo de Estado, fueron funcionales a la dictadura en la persona de muchos de sus dirigentes, o incluso participaron de la instauración del terrorismo de Estado antes del 24 de marzo de 1976, llevando al poder a López Rega.
Aún muchos años después, varios de los que hoy se atribuyen como propia la bandera de los derechos humanos, fueron disciplinados funcionarios del menemismo y callaron de manera cómplice ante los indultos y las políticas neoliberales privatizadoras que quebraron al país durante la última década del siglo XX.
Con profundo dolor vimos reflejada en los medios una escalada de acusaciones infundadas, tanto contra el socialismo como contra organizaciones hermanas en la lucha por la defensa de los derechos humanos.
Estamos obligados a decir las cosas como son, como bien lo señalara la respuesta del Secretario General de la Seccional Uruguay de AGMER: el día viernes 23 a la noche se había llegado a un consenso en relación a un documento único en el que, entre otras cosas, se resolvió no mencionar las críticas a las violaciones a los derechos humanos ocurridos durante los gobiernos kirchneristas, justamente en la búsqueda del ansiado consenso.
El mismo sábado 24, por la mañana, nos enteremos de que los querellantes y las agrupaciones afines al gobierno nacional, habían roto el consenso por ellos mismos acordado horas antes.
Expresamos que desde el socialismo no íbamos a firmar un documento que dijera que el único artífice de los derechos humanos fue Néstor Kirchner, porque eso sería faltar a la verdad, entendiendo que los derechos humanos y la democracia no son atribuibles a una sola persona ni a un sector, sino producto del esfuerzo colectivo de miles de argentinas y argentinos.
En el mismo sentido se expresaron el resto de las organizaciones, a excepción de las que aparecen como afines al gobierno.
Nos preguntamos: si hubiésemos firmado el documento oficialista, ¿el Partido Socialista habría dejado de “ejercitar una práctica facciosa, oportunismo político, cinismo histórico y atroz falta de solidaridad”? Y en su caso, ¿los querellantes hubiesen firmado un documento con un partido que representa, a su entender, los agravios por ellos expresados?
Nos duelen la mentira y el agravio infundado, pero no nos detendrán para seguir adelante, como lo hemos hecho desde hace años, en la lucha incansable por la defensa y vigencia de los derechos humanos, tanto del pasado como del presente. Seguiremos también acompañando a los familiares, testigos y querellantes en la inquebrantable lucha por verdad y justicia."
Partido Socialista de Concepción del Uruguay
Paulo González, Jorge Villanova, Luisa Acevedo, Federico Tálamo, Elena Cepeda, Américo Schvartzman, Verónica Magni, Pablo Pescio, Javier Lescano, Javier Rossi, Elba Esteve.
¿Cuál es la fundamentación de la los firmantes de la carta para tal acusación? El colaboracionismo de un dirigente de uno de los grupos en los que se hallaba dividido el Partido Socialista durante esa época. Se omite, por ejemplo, la trayectoria de dirigentes como Alfredo Bravo, víctima de la dictadura y fundador de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, o el rechazo tajante al golpe de Guillermo Estévez Boero –cuando otros sectores de la izquierda lo alentaban–, entre tantos otros socialistas que honraron la defensa de la democracia y los derechos humanos. Mencionar un caso y no los otros es un uso sesgado de una verdad histórica, valorada de manera tendenciosa y calumniante.
El Partido Socialista de la Argentina se reunificó precisamente sobre la base de dirigentes y líneas como la de estos referentes mencionados, rectificando las distorsiones y errores cometidos, sin justificar equivocaciones sino cambiando el rumbo.
Esto también es parte de la historia, como lo es que otras fuerzas políticas, entre ellas las mayoritarias, que hoy repudian junto a nosotros el terrorismo de Estado, fueron funcionales a la dictadura en la persona de muchos de sus dirigentes, o incluso participaron de la instauración del terrorismo de Estado antes del 24 de marzo de 1976, llevando al poder a López Rega.
Aún muchos años después, varios de los que hoy se atribuyen como propia la bandera de los derechos humanos, fueron disciplinados funcionarios del menemismo y callaron de manera cómplice ante los indultos y las políticas neoliberales privatizadoras que quebraron al país durante la última década del siglo XX.
Con profundo dolor vimos reflejada en los medios una escalada de acusaciones infundadas, tanto contra el socialismo como contra organizaciones hermanas en la lucha por la defensa de los derechos humanos.
Estamos obligados a decir las cosas como son, como bien lo señalara la respuesta del Secretario General de la Seccional Uruguay de AGMER: el día viernes 23 a la noche se había llegado a un consenso en relación a un documento único en el que, entre otras cosas, se resolvió no mencionar las críticas a las violaciones a los derechos humanos ocurridos durante los gobiernos kirchneristas, justamente en la búsqueda del ansiado consenso.
El mismo sábado 24, por la mañana, nos enteremos de que los querellantes y las agrupaciones afines al gobierno nacional, habían roto el consenso por ellos mismos acordado horas antes.
Expresamos que desde el socialismo no íbamos a firmar un documento que dijera que el único artífice de los derechos humanos fue Néstor Kirchner, porque eso sería faltar a la verdad, entendiendo que los derechos humanos y la democracia no son atribuibles a una sola persona ni a un sector, sino producto del esfuerzo colectivo de miles de argentinas y argentinos.
En el mismo sentido se expresaron el resto de las organizaciones, a excepción de las que aparecen como afines al gobierno.
Nos preguntamos: si hubiésemos firmado el documento oficialista, ¿el Partido Socialista habría dejado de “ejercitar una práctica facciosa, oportunismo político, cinismo histórico y atroz falta de solidaridad”? Y en su caso, ¿los querellantes hubiesen firmado un documento con un partido que representa, a su entender, los agravios por ellos expresados?
Nos duelen la mentira y el agravio infundado, pero no nos detendrán para seguir adelante, como lo hemos hecho desde hace años, en la lucha incansable por la defensa y vigencia de los derechos humanos, tanto del pasado como del presente. Seguiremos también acompañando a los familiares, testigos y querellantes en la inquebrantable lucha por verdad y justicia."
Partido Socialista de Concepción del Uruguay
Paulo González, Jorge Villanova, Luisa Acevedo, Federico Tálamo, Elena Cepeda, Américo Schvartzman, Verónica Magni, Pablo Pescio, Javier Lescano, Javier Rossi, Elba Esteve.
