Disparo radical sobre el Urri-Kirchnerismo
Para Benedetti las obras de la provincia no se concretan y quedan en carteles
El diputado nacional por la UCR, Atilio Benedetti, ironizó respecto del Gobernador, al que le endilgó que su discurso es de "anunciolandia". Por otro lado, sentenció que a Urribarri "se le acabaron los tiempos de anuncios y de promesas".
03.08.2012 | 11:23
“Contradiciendo el relato oficial, Entre Ríos sigue siendo la provincia más postergada de la Región Centro, con el peor sistema educativo, con paros docentes, empleados públicos mal pagos, con una deuda pública alarmante y creciente (cómo ejemplo basta decir que en el año 2011 la deuda flotante alcanzó los 1.521 millones de pesos, lo que demuestra que Urribarri multiplicó por cuatro veces y media la deuda que él recibió, de su propio gobierno, en el año 2007) sin un proyecto que la encauce en un camino de desarrollo como se merecen sus habitantes, y totalmente sometida al capricho del Gobierno nacional, a pesar de los sueños artiguistas de su gobernador”.
La afirmación es del diputado nacional Atilio Benedetti. Este jueves volvió a la carga con una dura declaración política, que a la luz de la interna en marcha en el radicalismo, lo afirma en el polo partidario más crítico al gobierno provincial. “A Urribarri se le terminaron los tiempos de las promesas y los anuncios, después de casi nueve años de ejercer el gobierno como ministro de (Jorge) Busti, primero, y gobernador después”, planteó el último candidato a gobernador del radicalismo.
Esta vez, Benedetti se tomó de un reportaje que concedió el ministro de Cultura y Comunicación, Pedro Báez al semanario Análisis. (Ver aparte)
Interpretó que con esas declaraciones, el funcionario cometió un “acto de sincericidio”, porque “confesó que, en sintonía con el gobierno nacional, Urribarri sólo basa su gestión en el famoso relato.
Tanto la quiere imitar a la Presidente que así cómo ella tiene al ‘comisario’ Moreno, para inventar e imponer el relato oficial, él lo tiene a Báez. No nos equivocamos durante la campaña cuando decíamos que el discurso de Urribarri era anunciolandia”, dijo Benedetti.
“Contó que cuando Urribarri decidió crear la cartera a su cargo le habló de la pelea que tiene la Argentina para configurar un relato y a ese relato había que instalarlo en la provincia, aunque para eso sea necesario castigar medios de comunicación quitándole la publicidad, cómo el mismo Báez reconoce”, agregó Benedetti.
Plan Quinquenal
“Por más que nos cuenten otra cosa, los entrerrianos comprobamos a diario que los estridentes anuncios y rimbombantes presentaciones de futuras obras, pocas veces se concretan y todo queda en los carteles o en las páginas de los diarios adictos al gobierno. El mejor ejemplo es el famoso Plan Quinquenal 2011-2015, que se lanzó en diciembre de 2010. Fue una larguísima lista de proyectos y programas que iban a convertir a Entre Ríos en una especie de Suiza. Lamentablemente, la realidad actual es que el gobierno provincial apenas paga los sueldos, y día a día endeuda más la provincia, en la época de mayor bonanza económica de la historia”, consideró.
Más adelante, el vicepresidente del Comité Nacional de la UCR recordó que “ese Plan Quinquenal anunciaba, entre tantas promesas incumplidas, la optimización del sistema portuario, pero a un año del derrumbe del Puerto de Ibicuy todavía no se han iniciado las obras de reparación y continúa inactivo”.
Resaltó también que “en la interminable lista de buenos propósitos, Urribarri prometía reactivar el sistema ferroviario entrerriano, y hasta ahora los trenes que circulan diariamente sólo van de Paraná a Colonia Avellaneda y a Oro Verde, y descarrilan cada semana, porque invirtió en lindas máquinas, pero lo que está en la tierra y no se ve, que son las vías y el resto de la infraestructura, está destrozado”.
Siempre refiriéndose a las promesas del Gobernador, mencionó el Programa para el Sector Industrial, incluido en el Plan Quinquenal. “¿Se habrá referido a los cinco millones de pesos que le regaló en subsidios a Grandes Máquinas S. A., de Concepción del Uruguay, cuyas 18 cosechadoras que iba a exportar a Uganda siguen siendo tan virtuales como los anuncios de Urribarri?”, se preguntó el legislador radical.
También dijo que “el faraónico Estadio Único de Paraná presentado en el Teatro 3 de Febrero, por ahora sólo es un dibujo enorme que Báez colgó en el Consejo General de Educación, ya que no se sabe cuánto costará ni se conoce el proyecto de obra”.
“Esperemos que el nuevo hospital de Paraná no tenga el mismo destino que la anunciada pavimentación de la ruta 51, prometida por Urribarri en marzo del año pasado y que iba a estar concluida en 18 meses. Por ahora, el camino sigue igual de intransitable cuando llueve. Y en Paraná, las obras del hospital han sido remover tierra y trabajar en la playa de estacionamiento”, objetó.
La afirmación es del diputado nacional Atilio Benedetti. Este jueves volvió a la carga con una dura declaración política, que a la luz de la interna en marcha en el radicalismo, lo afirma en el polo partidario más crítico al gobierno provincial. “A Urribarri se le terminaron los tiempos de las promesas y los anuncios, después de casi nueve años de ejercer el gobierno como ministro de (Jorge) Busti, primero, y gobernador después”, planteó el último candidato a gobernador del radicalismo.
Esta vez, Benedetti se tomó de un reportaje que concedió el ministro de Cultura y Comunicación, Pedro Báez al semanario Análisis. (Ver aparte)
Interpretó que con esas declaraciones, el funcionario cometió un “acto de sincericidio”, porque “confesó que, en sintonía con el gobierno nacional, Urribarri sólo basa su gestión en el famoso relato.
Tanto la quiere imitar a la Presidente que así cómo ella tiene al ‘comisario’ Moreno, para inventar e imponer el relato oficial, él lo tiene a Báez. No nos equivocamos durante la campaña cuando decíamos que el discurso de Urribarri era anunciolandia”, dijo Benedetti.
“Contó que cuando Urribarri decidió crear la cartera a su cargo le habló de la pelea que tiene la Argentina para configurar un relato y a ese relato había que instalarlo en la provincia, aunque para eso sea necesario castigar medios de comunicación quitándole la publicidad, cómo el mismo Báez reconoce”, agregó Benedetti.
Plan Quinquenal
“Por más que nos cuenten otra cosa, los entrerrianos comprobamos a diario que los estridentes anuncios y rimbombantes presentaciones de futuras obras, pocas veces se concretan y todo queda en los carteles o en las páginas de los diarios adictos al gobierno. El mejor ejemplo es el famoso Plan Quinquenal 2011-2015, que se lanzó en diciembre de 2010. Fue una larguísima lista de proyectos y programas que iban a convertir a Entre Ríos en una especie de Suiza. Lamentablemente, la realidad actual es que el gobierno provincial apenas paga los sueldos, y día a día endeuda más la provincia, en la época de mayor bonanza económica de la historia”, consideró.
Más adelante, el vicepresidente del Comité Nacional de la UCR recordó que “ese Plan Quinquenal anunciaba, entre tantas promesas incumplidas, la optimización del sistema portuario, pero a un año del derrumbe del Puerto de Ibicuy todavía no se han iniciado las obras de reparación y continúa inactivo”.
Resaltó también que “en la interminable lista de buenos propósitos, Urribarri prometía reactivar el sistema ferroviario entrerriano, y hasta ahora los trenes que circulan diariamente sólo van de Paraná a Colonia Avellaneda y a Oro Verde, y descarrilan cada semana, porque invirtió en lindas máquinas, pero lo que está en la tierra y no se ve, que son las vías y el resto de la infraestructura, está destrozado”.
Siempre refiriéndose a las promesas del Gobernador, mencionó el Programa para el Sector Industrial, incluido en el Plan Quinquenal. “¿Se habrá referido a los cinco millones de pesos que le regaló en subsidios a Grandes Máquinas S. A., de Concepción del Uruguay, cuyas 18 cosechadoras que iba a exportar a Uganda siguen siendo tan virtuales como los anuncios de Urribarri?”, se preguntó el legislador radical.
También dijo que “el faraónico Estadio Único de Paraná presentado en el Teatro 3 de Febrero, por ahora sólo es un dibujo enorme que Báez colgó en el Consejo General de Educación, ya que no se sabe cuánto costará ni se conoce el proyecto de obra”.
“Esperemos que el nuevo hospital de Paraná no tenga el mismo destino que la anunciada pavimentación de la ruta 51, prometida por Urribarri en marzo del año pasado y que iba a estar concluida en 18 meses. Por ahora, el camino sigue igual de intransitable cuando llueve. Y en Paraná, las obras del hospital han sido remover tierra y trabajar en la playa de estacionamiento”, objetó.
Fuente: Página Política