Reforma del código de 1869
La iglesia critica posibles cambios en el Código Civil
El obispo de Gualeguaychú, Jorge Lozano, salió a pedir "todo el tiempo que sea necesario" para el análisis de la reforma del Código Civil. En este sentido, en coincidencia con la Conferencia Episcopal Argentina, criticó algunos cambios en discusión.
27.08.2012 | 10:45
Lozano, en nombre de la iglesia católica, pidió que se realicen audiencias públicas en cada provincia y se otorgue “todo el tiempo que sea necesario” al debate con respecto a la reforma del código civil.
Por otro lado, y según consignó El Once Digital, advirtió críticamente sobre algunos puntos que podrían modificarse en el código. “Algunos seres humanos en gestación no tendrán derecho a ser llamados ‘personas’, la maternidad y la paternidad quedarán desfiguradas con la denominada ‘voluntad procreacional’, se legitimará la promoción del ‘alquiler de vientres’ que cosifica a la mujer y el congelar embriones humanos por tiempo indeterminado, pudiendo ser éstos descartados o utilizados con fines comerciales y de investigación”, enumeró.
Asimismo, agregó: “Se discriminará, en su derecho a la identidad, a quienes sean concebidos por fecundación artificial, porque no podrán conocer quién es su madre o su padre biológico; los cónyuges que se unan en matrimonio no tendrán obligación jurídica de fidelidad ni tampoco de convivir bajo un mismo techo”.
La posición crítica de la iglesia católica con respecto a la reforma del CV fue respondida por el titular de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, quien aceptó los puntos de vista de la institución religiosa, pero aclaró que el código es una representación del Estado argentino y no de una parte.
Finalmente, Lozano continuó con las denuncias sobre posibles consecuencias que acarrearían las modificaciones: “Los lazos afectivos matrimoniales quedarán debilitados y desvalorizados”, aseguró. (Redacción de Babel)
Por otro lado, y según consignó El Once Digital, advirtió críticamente sobre algunos puntos que podrían modificarse en el código. “Algunos seres humanos en gestación no tendrán derecho a ser llamados ‘personas’, la maternidad y la paternidad quedarán desfiguradas con la denominada ‘voluntad procreacional’, se legitimará la promoción del ‘alquiler de vientres’ que cosifica a la mujer y el congelar embriones humanos por tiempo indeterminado, pudiendo ser éstos descartados o utilizados con fines comerciales y de investigación”, enumeró.
Asimismo, agregó: “Se discriminará, en su derecho a la identidad, a quienes sean concebidos por fecundación artificial, porque no podrán conocer quién es su madre o su padre biológico; los cónyuges que se unan en matrimonio no tendrán obligación jurídica de fidelidad ni tampoco de convivir bajo un mismo techo”.
La posición crítica de la iglesia católica con respecto a la reforma del CV fue respondida por el titular de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, quien aceptó los puntos de vista de la institución religiosa, pero aclaró que el código es una representación del Estado argentino y no de una parte.
Finalmente, Lozano continuó con las denuncias sobre posibles consecuencias que acarrearían las modificaciones: “Los lazos afectivos matrimoniales quedarán debilitados y desvalorizados”, aseguró. (Redacción de Babel)