Por Valodia Nichajew
Hay que ser muy hijo de puta
Hay que ser muy hijo de puta para usar a chicos entre 14 y 19 años con el fin de perjudicar al Gobierno Nacional. Hay que ser muy hijo de puta para llevarlos a ser carne de cañón de saqueos a los que ni siquiera fueron sus padres.
21.12.2012 | 06:55
Los chicos fueron convocados por mensajes de texto. “Esta noche a las 10 hay saqueo en Impulso, reenviar”, decía la invitación. Y los chicos fueron. Afuera de los supermercados que se intentaron saquear, Impulso y El Día, el 90 por ciento de los manifestantes eran jóvenes entre 14 y 19 años.
“Mañana rindo”, le decía un chico de unos 13 o 14 años a otro en las afueras de El Día. “¿Qué rendís?”, le preguntó este cronista. “Historia, pero no importa porque ya estudié”, aseguró.
Jóvenes de a pie, otros en grupos de motocicletas, algunos pocos en bicicleta iban llegando a los sitios de la convocatoria. “Nos enteramos por mensaje de texto y otros por Facebook”, relató Julián, un chico de no más de 17 años.
Hay que ser muy hijos de puta para usarlos. Porque reitero el dato: el 90 por ciento de los manifestantes, aproximadamente, eran jóvenes que en su mayoría no superaban los 19 años y habían sido convocados.
La pregunta deriva en lógica. ¿Qué se buscó? La respuesta no. ¿Cargarle chicos heridos, o situaciones peores, a la Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner? Esa es una posible respuesta, aunque seguramente no la única. (Redacción de Babel)
“Mañana rindo”, le decía un chico de unos 13 o 14 años a otro en las afueras de El Día. “¿Qué rendís?”, le preguntó este cronista. “Historia, pero no importa porque ya estudié”, aseguró.
Jóvenes de a pie, otros en grupos de motocicletas, algunos pocos en bicicleta iban llegando a los sitios de la convocatoria. “Nos enteramos por mensaje de texto y otros por Facebook”, relató Julián, un chico de no más de 17 años.
Hay que ser muy hijos de puta para usarlos. Porque reitero el dato: el 90 por ciento de los manifestantes, aproximadamente, eran jóvenes que en su mayoría no superaban los 19 años y habían sido convocados.
La pregunta deriva en lógica. ¿Qué se buscó? La respuesta no. ¿Cargarle chicos heridos, o situaciones peores, a la Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner? Esa es una posible respuesta, aunque seguramente no la única. (Redacción de Babel)