Encuentro nacional
Kirchnerismo al palo en Paraná
El Vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, participó en Paraná del encuentro nacional del Kirchnerismo al que concurrieron más de 500 dirigentes de todo el país. Por su parte, Urribarri, como anfitrión, fue quien encabezó las dos jornadas.
16.03.2013 | 12:45
El club Etchagüe de Paraná fue el lugar elegido para el cónclave K. Entonces, llegaron hasta la capital entrerriana, Boudou, el Jefe de Gabinete de la Nación, Juan Manuel Abal Medina, el titular de la Anses, Diego Bossio, y unos 11 gobernadores, además de legisladores y militantes en sí mismo.
El encuentro, lejos de pasar desapercibido hacia dentro de la política nacional, fue el disparador de una separación tácita entre el Kirchnerismo duro y el Gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, quien no fue invitado. En este sentido, en diálogo con medios nacionales, Sergio Urribarri había sincerado que el bonaerense no fue invitado “porque no consideraban que esté comprometido” con el proyecto que encabeza la Presidenta.
“Esto es para los incondicionales, no para los que tienen proyectos personales”, arengó Urribarri, cuando llegó el momento de su discurso. La referencia fue obvia.
En este sentido, utilizó una simpática metáfora para lanzar, indirectamente, dardos contra Scioli. “Los que estuvimos en las horas difíciles de este proyecto no admitimos a los que como el tero gritan en un lado y ponen los huevos en otro”, sentenció. (Redacción de Babel)
El encuentro, lejos de pasar desapercibido hacia dentro de la política nacional, fue el disparador de una separación tácita entre el Kirchnerismo duro y el Gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, quien no fue invitado. En este sentido, en diálogo con medios nacionales, Sergio Urribarri había sincerado que el bonaerense no fue invitado “porque no consideraban que esté comprometido” con el proyecto que encabeza la Presidenta.
“Esto es para los incondicionales, no para los que tienen proyectos personales”, arengó Urribarri, cuando llegó el momento de su discurso. La referencia fue obvia.
En este sentido, utilizó una simpática metáfora para lanzar, indirectamente, dardos contra Scioli. “Los que estuvimos en las horas difíciles de este proyecto no admitimos a los que como el tero gritan en un lado y ponen los huevos en otro”, sentenció. (Redacción de Babel)
