Año electoral
UCR y PS: a pesar del rechazo de la militancia, sus dirigentes coquetean con un frente
Referentes del radicalismo y del socialismo manifestaron que no verían mal un acercamiento entre ambos para conformar un frente. Sin embargo, las bases rechazan la idea y, además, meses atrás las mismas conducciones también negaban reflotar la alianza.
30.04.2013 | 11:12
En el último Congreso partidario del PS, realizado el sábado en Paraná, el mensaje que llegó desde los militantes hacia la conducción partidaria fue claro: “No a la UCR”. En este sentido, se determinó avanzar en la consolidación del Frente Amplio Progresista (FAP) en la provincia y dejar “un posible acuerdo” con los radicales “para un futuro”. Además, la decisión también se circunscribiría al acuerdo entre el FAP nacional y la UCR nacional. (Ver aquí)
A pesar de tales posicionamientos, el concejal por el PS en Paraná, Marcelo Haddad, afirmó en los medios que “deben afianzar un frente con la UCR y con Proyecto Sur”. (Ver aquí)
Por su parte, las posiciones hacia dentro de la UCR en cuanto a su relación con los socialistas fue cambiando en algunos casos en 180 grados y, en otros, el cambio fue tal que quedaron en el mismo punto de partida, o sea un giro de 360 grados.
Un caso particular es el llevado adelante por el Movimiento Yrigoyenista Entrerriano. Algunos de sus referentes, por ejemplo, los uruguayenses Guillermo Vázquez y Juan Carlos “Cholo” Aguirre, fueron de los principales detractores del Frente Progresista (FP), la alianza entre la UCR y el PS, para las elecciones del 2011. No obstante, el espacio de Vázquez ahora quiere avanzar en un acuerdo. (Ver aquí)
El otro espacio radical, la Corriente Arturo Illia, que encabeza Atilio Benedetti, fue la que impulsó en las pasadas elecciones el FP. En este sentido, los Benedetistas, este 2013, en un comienzo rechazaban volver a una alianza ya que consideraban “que la UCR debía ir sola a las elecciones”. Hasta allí un cambio de 180 grados. Sin embargo, otro medio giro hizo completar el círculo y ahora los Benedetistas “verían con buenos ojos un frente con el Socialismo”. Una vuelta de 360 grados. (Ver aquí)
De todos modos, la militancia de a pie del radicalismo tampoco quiere reflotar el acuerdo con el PS, por más que parte de su dirigencia impulse al partido para tales caminos. La situación en el socialismo es a misma: sus militantes de base tampoco la desean, por más que sus referentes empujen en ese sentido.
Así queda en evidencia cada vez que tienen oportunidad de hablar, ya sea en un ambiente político, como fue el caso del Congreso Socialista, como también sucede por afuera de los espacios partidarios. (Redacción de Babel)
--- Ver notas aparte ---
A pesar de tales posicionamientos, el concejal por el PS en Paraná, Marcelo Haddad, afirmó en los medios que “deben afianzar un frente con la UCR y con Proyecto Sur”. (Ver aquí)
Por su parte, las posiciones hacia dentro de la UCR en cuanto a su relación con los socialistas fue cambiando en algunos casos en 180 grados y, en otros, el cambio fue tal que quedaron en el mismo punto de partida, o sea un giro de 360 grados.
Un caso particular es el llevado adelante por el Movimiento Yrigoyenista Entrerriano. Algunos de sus referentes, por ejemplo, los uruguayenses Guillermo Vázquez y Juan Carlos “Cholo” Aguirre, fueron de los principales detractores del Frente Progresista (FP), la alianza entre la UCR y el PS, para las elecciones del 2011. No obstante, el espacio de Vázquez ahora quiere avanzar en un acuerdo. (Ver aquí)
El otro espacio radical, la Corriente Arturo Illia, que encabeza Atilio Benedetti, fue la que impulsó en las pasadas elecciones el FP. En este sentido, los Benedetistas, este 2013, en un comienzo rechazaban volver a una alianza ya que consideraban “que la UCR debía ir sola a las elecciones”. Hasta allí un cambio de 180 grados. Sin embargo, otro medio giro hizo completar el círculo y ahora los Benedetistas “verían con buenos ojos un frente con el Socialismo”. Una vuelta de 360 grados. (Ver aquí)
De todos modos, la militancia de a pie del radicalismo tampoco quiere reflotar el acuerdo con el PS, por más que parte de su dirigencia impulse al partido para tales caminos. La situación en el socialismo es a misma: sus militantes de base tampoco la desean, por más que sus referentes empujen en ese sentido.
Así queda en evidencia cada vez que tienen oportunidad de hablar, ya sea en un ambiente político, como fue el caso del Congreso Socialista, como también sucede por afuera de los espacios partidarios. (Redacción de Babel)
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