Habeas Data contra Diario Junio
Verbitsky y el CELS se presentaron como Amicus Curiae en la Cámara Federal de Paraná
El fallo de la jueza federal de Concepción del Uruguay, Beatriz Aranguren, contra DIARIOJUNIO, Yahoo y Google, sigue mostrando cuan gravoso resulta para el derecho de la sociedad a informarse libremente. Ahora, el abogado del periodista Claudio Gastaldi (condenado por esa jueza a borrar del archivo del diario el pasado molesto de Julián Quevedo), informó que el prestigioso Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) que preside Horacio Verbitsky, se presentó ante la Cámara de Apelaciones de Paraná, con un extenso escrito en calidad de amicus curiae.
08.05.2014 | 13:37
DIARIOJUNIO promete en una próxima entrega sobre el particular, dar a conocer a nuestros lectores y en exclusiva, los argumentos del Amicus presentado por el CELS. Por lo pronto, vale destacar que, según los dichos de Paglioto a DIARIOJUNIO, es la primera vez que los tribunales federales de Paraná reciben un amicus desde su implementación hace ya 10 años.
Quizá ese texto presentado por uno de los organismos de Derechos Humanos más prestigiados en la argentina y el mundo pueda ayudar a Roberto Beherán, abogado y patrocinador del juez fugaz, a pensar en su violento escrito de defensa de Quevedo.
En ese texto, Beheran se animó a sostener que lo que Claudio Gastaldi había publicado era una herejía y lo dijo así “aunque no pretende tanto, ya los antiguos consideraban a la maledicencia (calumnia) un delito tan grave que merecía la pena de muerte”. La lectura del amicus lo podrá orientar y hacer saber que el derecho ha experimentado avances interesantes en la materia.
Es llamativo que tampoco a la jueza Aranguren (que les dio la razón), le haya sorprendido tamaña literatura. Ser capaz de sostener en un escrito, tal cosa, ante una jueza de la democracia y que esta no repare en su dimensión y alcance, es por lo menos, curioso, especialmente si se observa nuestra historia reciente, donde los periodistas que se animaban a cumplir su tarea, pagaban con su vida la osadía.
DECLARACIONES DE PAGLIOTO A PAGINA JUDICIALY REPRODUCIDAS POR ANALISIS
El abogado Rubén Pagliotto, que representa al periodista, cuestionó que la jueza Aranguren “se inclina abiertamente por otorgar credibilidad palmaria a los dichos del ex magistrado interino (Quevedo) por sobre lo que aportaron como argumentos defensivos el consorcio de demandados”, en referencia a Gastaldi, Yahoo! y Google.
Más allá de esto, en su escrito ante la Cámara Federal de Apelaciones de Paraná, Pagliotto hizo hincapié en que la pretensión de Quevedo, a la cual hizo lugar la jueza Aranguren, “juega abiertamente en contra de la libertad de expresión y opinión”.
Además, adelantó (en el momento que le hicieron la nota) que el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), a través del abogado Damián Loreti, se presentará ante el tribunal para que sea tenido en cuenta como amicus curiae y se le permita dar su opinión en el caso (lo que ocurrió y que nosotros estamos publicando.
Esta figura, que traducida del latín significa “amigos del tribunal”, es un recurso para que las personas individuales o colectivas que tengan un interés legítimo y justificado en brindar su opinión sobre diferentes cuestiones tratadas en un proceso, puedan hacerlo, y así lo reguló la Corte Suprema a partir de 2004.
Respecto de la apelación, Pagliotto consideró que “es inaceptable que (…) un señor que no soporta los archivos eche mano a la justicia para arremeter contra los periodistas o medios que simplemente cumplieron con la tarea de difundir una información que aparece en la web” e insistió en que Diario Junio “en modo alguno es el responsable de que el nombre de Quevedo aparezca en la web emparentado con hechos gravísimos” y agregó: Gastaldi no inventó las solicitadas. Estas existieron y desde hacía diez años estaban consignadas en los sitios web”.
En su momento, Quevedo negó haber suscripto las notas de apoyo al represor de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA): “No sé cómo esos nombres (el suyo, el de su esposa y otros familiares de la mujer) fueron incluidos en las peticiones” al presidente mexicano Vicente Fox.
Sin embargo, Pagliotto destacó el rol que cumplió el general Raúl José Ortiz, suegro de Quevedo, durante la represión, como fundamento para sostener que “la aparición de su nombre y apellido completo (de Quevedo), junto a su número de DNI en por lo menos dos notas, en diferentes años (2002/2003) y con la misma orientación ideológica es demasiada coincidencia como para creer, sin más, sus dichos respecto de que él no firmó nada”.
Quizá ese texto presentado por uno de los organismos de Derechos Humanos más prestigiados en la argentina y el mundo pueda ayudar a Roberto Beherán, abogado y patrocinador del juez fugaz, a pensar en su violento escrito de defensa de Quevedo.
En ese texto, Beheran se animó a sostener que lo que Claudio Gastaldi había publicado era una herejía y lo dijo así “aunque no pretende tanto, ya los antiguos consideraban a la maledicencia (calumnia) un delito tan grave que merecía la pena de muerte”. La lectura del amicus lo podrá orientar y hacer saber que el derecho ha experimentado avances interesantes en la materia.
Es llamativo que tampoco a la jueza Aranguren (que les dio la razón), le haya sorprendido tamaña literatura. Ser capaz de sostener en un escrito, tal cosa, ante una jueza de la democracia y que esta no repare en su dimensión y alcance, es por lo menos, curioso, especialmente si se observa nuestra historia reciente, donde los periodistas que se animaban a cumplir su tarea, pagaban con su vida la osadía.
DECLARACIONES DE PAGLIOTO A PAGINA JUDICIALY REPRODUCIDAS POR ANALISIS
El abogado Rubén Pagliotto, que representa al periodista, cuestionó que la jueza Aranguren “se inclina abiertamente por otorgar credibilidad palmaria a los dichos del ex magistrado interino (Quevedo) por sobre lo que aportaron como argumentos defensivos el consorcio de demandados”, en referencia a Gastaldi, Yahoo! y Google.
Más allá de esto, en su escrito ante la Cámara Federal de Apelaciones de Paraná, Pagliotto hizo hincapié en que la pretensión de Quevedo, a la cual hizo lugar la jueza Aranguren, “juega abiertamente en contra de la libertad de expresión y opinión”.
Además, adelantó (en el momento que le hicieron la nota) que el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), a través del abogado Damián Loreti, se presentará ante el tribunal para que sea tenido en cuenta como amicus curiae y se le permita dar su opinión en el caso (lo que ocurrió y que nosotros estamos publicando.
Esta figura, que traducida del latín significa “amigos del tribunal”, es un recurso para que las personas individuales o colectivas que tengan un interés legítimo y justificado en brindar su opinión sobre diferentes cuestiones tratadas en un proceso, puedan hacerlo, y así lo reguló la Corte Suprema a partir de 2004.
Respecto de la apelación, Pagliotto consideró que “es inaceptable que (…) un señor que no soporta los archivos eche mano a la justicia para arremeter contra los periodistas o medios que simplemente cumplieron con la tarea de difundir una información que aparece en la web” e insistió en que Diario Junio “en modo alguno es el responsable de que el nombre de Quevedo aparezca en la web emparentado con hechos gravísimos” y agregó: Gastaldi no inventó las solicitadas. Estas existieron y desde hacía diez años estaban consignadas en los sitios web”.
En su momento, Quevedo negó haber suscripto las notas de apoyo al represor de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA): “No sé cómo esos nombres (el suyo, el de su esposa y otros familiares de la mujer) fueron incluidos en las peticiones” al presidente mexicano Vicente Fox.
Sin embargo, Pagliotto destacó el rol que cumplió el general Raúl José Ortiz, suegro de Quevedo, durante la represión, como fundamento para sostener que “la aparición de su nombre y apellido completo (de Quevedo), junto a su número de DNI en por lo menos dos notas, en diferentes años (2002/2003) y con la misma orientación ideológica es demasiada coincidencia como para creer, sin más, sus dichos respecto de que él no firmó nada”.
Fuente: Diario Junio