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El eterno contrera: Busti criticó el acuerdo alcanzado con el Club de París
El titular del Frente Entrerriano Federal, Jorge Busti, vio con mirada negativa el acuerdo que alcanzó Argentina con el Club de Paris, un grupo de 19 países acreedores. Para el ex Gobernador “se está dejando una herencia bastante pesada”. Desde el 2002, el país había entrado en suspensión de pago.
29.05.2014 | 19:34
Primero lo primero. La actual administración nacional, que conduce la Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, no tomó un sólo dólar de deuda ante el llamado Club de París. Desde el 2003, cuando asumió Néstor Kirchner, sólo se han dedicado esfuerzos en pagarles o, en este caso, en alcanzar acuerdos que le permita a Argentina acceder a crédito internacional. El paso dado en la madrugada de este jueves fue en tal sentido y con el agregado de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) no tendrá injerencia alguna.
Lea: El acuerdo en París bien valió el desvelo
Sin embargo, el ex candidato a Gobernador por el FEF en el 2011, Busti, lejos de avalar y aplaudir de que el estado argentino, tras el acuerdo, continuará desendeudandosé, lo que repercutirá en menos intereses a pagar y mayor nivel de soberanía, lamentó lo acordado.
“Se está dejando una herencia bastante pesada para quien venga después”, consideró Busti. “Hace 12 años que estábamos en esta situación y se arregla todo ahora, cuando ya queda tan poco para que se termine el gobierno y dejan deudas para quien venga después”, agregó, según publicó el portal Análisis Digital.
Vale recordar que desde el 2003, los gobiernos que se han sucedido han logrado un desendeudamiento del orden de los 80 mil millones de dólares, entre la quita de deuda conseguida por Kirchner, el pago al FMI y, ahora, el acuerdo con los 19 países que integran el Club de Paris.
En este contexto, el líder del masismo entrerriano, observó que “el gobierno va a hacer un solo pago y los otros lo van a tener que hacer los próximos gobiernos”. “Me parece que están pateando para adelante una deuda muy grande”, valoró.
Tal cual recordó esta mañana el matutino Página/12, concretar la salida del default con el grupo de acreedores soberanos forma parte del proceso de regularización de pasivos encarado por Argentina después de la crisis de 2002. No fue el primer intento.
“A lo largo de los últimos años se registraron diferentes tentativas que fueron abortadas: en septiembre de 2008, CFK anunció que se cancelaría en un pago con reservas del Banco Central por 6706 millones de dólares. A los pocos días del anuncio cayó el banco Lehman Brothers y se desató una grave crisis internacional. Frente al estallido, primó la precaución y se dejó el pago en suspenso. Los intentos de 2010 y 2011 tampoco prosperaron”, o.
De todos modos, la deuda que los argentinos tienen con el Club de París son de larga data. Alrededor de la mitad de los compromisos impagos son previos a 1983, fundamentalmente tomados durante la última dictadura militar.
El 9 por ciento de la deuda corresponde al gobierno de Raúl Alfonsín, mientras que el 42 por ciento restante se asumió durante los mandatos de Carlos Menem y Fernando de la Rúa.
Sin contar el principio de acuerdo alcanzado ayer, Argentina ya realizó siete renegociaciones. La primera fue en 1956, durante el gobierno de facto de Aramburu, y marcó el nacimiento del Club de París. El resto de los acuerdos se alcanzaron en 1965 (Illia), 1985 y 1987 (Alfonsín) y las restantes en 1989, 1991 y 1992 (Menem). La larga historia con el Club escribirá hoy un nuevo capítulo.
Lea: El acuerdo en París bien valió el desvelo
Sin embargo, el ex candidato a Gobernador por el FEF en el 2011, Busti, lejos de avalar y aplaudir de que el estado argentino, tras el acuerdo, continuará desendeudandosé, lo que repercutirá en menos intereses a pagar y mayor nivel de soberanía, lamentó lo acordado.
“Se está dejando una herencia bastante pesada para quien venga después”, consideró Busti. “Hace 12 años que estábamos en esta situación y se arregla todo ahora, cuando ya queda tan poco para que se termine el gobierno y dejan deudas para quien venga después”, agregó, según publicó el portal Análisis Digital.
Vale recordar que desde el 2003, los gobiernos que se han sucedido han logrado un desendeudamiento del orden de los 80 mil millones de dólares, entre la quita de deuda conseguida por Kirchner, el pago al FMI y, ahora, el acuerdo con los 19 países que integran el Club de Paris.
En este contexto, el líder del masismo entrerriano, observó que “el gobierno va a hacer un solo pago y los otros lo van a tener que hacer los próximos gobiernos”. “Me parece que están pateando para adelante una deuda muy grande”, valoró.
Tal cual recordó esta mañana el matutino Página/12, concretar la salida del default con el grupo de acreedores soberanos forma parte del proceso de regularización de pasivos encarado por Argentina después de la crisis de 2002. No fue el primer intento.
“A lo largo de los últimos años se registraron diferentes tentativas que fueron abortadas: en septiembre de 2008, CFK anunció que se cancelaría en un pago con reservas del Banco Central por 6706 millones de dólares. A los pocos días del anuncio cayó el banco Lehman Brothers y se desató una grave crisis internacional. Frente al estallido, primó la precaución y se dejó el pago en suspenso. Los intentos de 2010 y 2011 tampoco prosperaron”, o.
De todos modos, la deuda que los argentinos tienen con el Club de París son de larga data. Alrededor de la mitad de los compromisos impagos son previos a 1983, fundamentalmente tomados durante la última dictadura militar.
El 9 por ciento de la deuda corresponde al gobierno de Raúl Alfonsín, mientras que el 42 por ciento restante se asumió durante los mandatos de Carlos Menem y Fernando de la Rúa.
Sin contar el principio de acuerdo alcanzado ayer, Argentina ya realizó siete renegociaciones. La primera fue en 1956, durante el gobierno de facto de Aramburu, y marcó el nacimiento del Club de París. El resto de los acuerdos se alcanzaron en 1965 (Illia), 1985 y 1987 (Alfonsín) y las restantes en 1989, 1991 y 1992 (Menem). La larga historia con el Club escribirá hoy un nuevo capítulo.