Rumbo a la Casa Rosada
Urribarri metió segunda y quiere al publicista que trabajó con Lula Da Silva
De cara a su precandidatura presidencial, el Gobernador, Sergio Urribarri, estaría buscando como responsable de su campaña a "Duda" Mendonca, el veterano publicista brasilero de vasta experiencia. Mendonca trabajó, por ejemplo, en la campaña de Lula Da Silva que lo llevó a presidencia carioca.
29.08.2014 | 15:42
Por Hugo Remedi
El gobernador Urribarri decepcionado por los resultados obtenidos hasta el momento por la responsable de instalar su candidatura a nivel nacional, descartó como eje central de su campaña publicitaria a Doris Capurro y tentó en su lugar al brasilero José Eduardo Cavalcanti “duda” de Mendonca. El primer mandatario provincial, Sergio Urribarri con ganas de ser presidente de los argentinos en 2.015 se enojó con el desarrollo de la campaña electoral a nivel nacional donde su figura continúa aún sin penetrar en el gran electorado nacional, y metió marcha atrás con la responsable actual de su campaña de imagen Doris Capurro y ya habría contratado en su lugar al brasilero Eduardo Duda Mendoca.
El bahiense Mendonca es uno de los principales publicistas y especialistas en estrategias electorales de Brasil pero sus servicios no son baratos. Tiene sobre el lomo casi 55 campañas electorales y más de 20 de experiencia.
Uno de sus principales logros es haber llevado a ser presidente a Lula Da Silva, en 2.002 luego de 4 intentos en vano. Aficionado a los gallos de riña, donde utiliza el nombre de guerra Sanzón, tiene como último logro haber hecho crecer considerablemente la figura del colombiano Oscar Zuluaga, en su disputa presidencial con Juan M. Santos con quien perdió recién en el ballotage.
En Argentina, recomendado en su momento por Carlos Menem, acompañó la campaña de Eduardo Duhalde, aunque sin éxito.
El timonazo de Urribarri se entiende hasta cargado de una tremenda osadía, habida cuenta de que Dorotea Gompertz, de nacimiento pero conocida en Argentina como Doris Capurro, es una figura cercana al kirchnerismo, fundamentalmente a la presidenta Cristina y actualmente maneja la caja publicitaria de YPF que preside Miguel Galuccio.
En definitiva la urgencia y la necesidad llevó a Urribarri a plantar bandera y a reiniciar la batalla electoral con nuevo jefe de propaganda.
Muy poco de lo que viene observando el mandatario entrerriano a nivel nacional, le cae bien. La euforia de un primer momento donde comenzó a mostrarse como la continuidad más ortodoxa del kirchnerismo, se fue diluyendo rápidamente de acuerdo a lo que registran los indicadores electorales nacionales. La única verdad, es que Urribarri aún no es tenido en cuenta con seriedad en el gran escenario nacional y por eso aparece en las encuestas muy por detrás de Daniel Scioli, y aunque un poco más cerca, de Florencio Randazzo e incluso del poco presentable Aníbal Fernández lo cual, no es para nada, un dato menor. Tampoco es aún tomada su candidatura con seriedad por los grandes medios nacionales y su desconocimiento que tiene el electorado sobre él es todavía muy grande.
Todos esos obstáculos, prometía superar Doris Capurro, en un primer momento. Pero nada de eso sucedió hasta el momento incluso el cepillado que han hecho sus enviados especiales a las distintas provincias del país así lo ratifican.
Finalmente Urribarri se encrespó y metió cambios a lo Bianchi, claro pero el peronismo -sobre todo el entrerriano- espera que el mandatario no termine como el ahora ex técnico de Boca.
Algunas cuestiones aún se manejan en potencial, pero lo único evidente es que la campaña nacional todavía no arroja los resultados que le prometieron al gobernador en su momento y el paso del tiempo de hecho angustia las expectativas.
Todo lo euforia que se vende en la parroquia del barrio de hecho no se replica en el resto de las provincias del país y motivo de la misma preocupación por estas horas se está organizando un gran encuentro de operadores de la campaña Urribarri para estas horas en Paraná, para redefinir estrategias.
El bahiense Mendonca es uno de los principales publicistas y especialistas en estrategias electorales de Brasil pero sus servicios no son baratos. Tiene sobre el lomo casi 55 campañas electorales y más de 20 de experiencia.
Uno de sus principales logros es haber llevado a ser presidente a Lula Da Silva, en 2.002 luego de 4 intentos en vano. Aficionado a los gallos de riña, donde utiliza el nombre de guerra Sanzón, tiene como último logro haber hecho crecer considerablemente la figura del colombiano Oscar Zuluaga, en su disputa presidencial con Juan M. Santos con quien perdió recién en el ballotage.
En Argentina, recomendado en su momento por Carlos Menem, acompañó la campaña de Eduardo Duhalde, aunque sin éxito.
El timonazo de Urribarri se entiende hasta cargado de una tremenda osadía, habida cuenta de que Dorotea Gompertz, de nacimiento pero conocida en Argentina como Doris Capurro, es una figura cercana al kirchnerismo, fundamentalmente a la presidenta Cristina y actualmente maneja la caja publicitaria de YPF que preside Miguel Galuccio.
En definitiva la urgencia y la necesidad llevó a Urribarri a plantar bandera y a reiniciar la batalla electoral con nuevo jefe de propaganda.
Muy poco de lo que viene observando el mandatario entrerriano a nivel nacional, le cae bien. La euforia de un primer momento donde comenzó a mostrarse como la continuidad más ortodoxa del kirchnerismo, se fue diluyendo rápidamente de acuerdo a lo que registran los indicadores electorales nacionales. La única verdad, es que Urribarri aún no es tenido en cuenta con seriedad en el gran escenario nacional y por eso aparece en las encuestas muy por detrás de Daniel Scioli, y aunque un poco más cerca, de Florencio Randazzo e incluso del poco presentable Aníbal Fernández lo cual, no es para nada, un dato menor. Tampoco es aún tomada su candidatura con seriedad por los grandes medios nacionales y su desconocimiento que tiene el electorado sobre él es todavía muy grande.
Todos esos obstáculos, prometía superar Doris Capurro, en un primer momento. Pero nada de eso sucedió hasta el momento incluso el cepillado que han hecho sus enviados especiales a las distintas provincias del país así lo ratifican.
Finalmente Urribarri se encrespó y metió cambios a lo Bianchi, claro pero el peronismo -sobre todo el entrerriano- espera que el mandatario no termine como el ahora ex técnico de Boca.
Algunas cuestiones aún se manejan en potencial, pero lo único evidente es que la campaña nacional todavía no arroja los resultados que le prometieron al gobernador en su momento y el paso del tiempo de hecho angustia las expectativas.
Todo lo euforia que se vende en la parroquia del barrio de hecho no se replica en el resto de las provincias del país y motivo de la misma preocupación por estas horas se está organizando un gran encuentro de operadores de la campaña Urribarri para estas horas en Paraná, para redefinir estrategias.
Fuente: Análisis Digital