Militancia uruguayense, La Cámpora
“Ser militante no es ir a sacarte una foto con un pibe de barrio”
Cecilia Gilabert, Álvaro Giménez, integrantes de la agrupación peronista La Cámpora, junto a la referente del espacio Ludmila Nichajew, brindaron una entrevista en donde reivindicaron la militancia y la política. “Militancia es el arma que tenemos para cambiar las cosas”, afirmó Gilabert.
20.04.2015 | 11:02
“Se ha estigmatizado a la militancia como algo malo y no es así”, consideró Cecilia Gilabert. “Hoy vemos que es el arma que tenemos todos los argentinos para cambiar las cosas y pelear conquistas que conseguimos”, agregó, en igual sentido de análisis.
La Cámpora uruguayense existe en la ciudad desde el 2010 cuando comenzaron a darse los primeros pasos. Ludmila Nichajew, vecina uruguayense, formó parte de los primeros integrantes y actualmente se desempeña como la referente de la agrupación que banca los trapos de la Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner.
Lea: La Cámpora en los barrios difundiendo el programa de las garrafas
“Nosotros, hoy, llevamos un gran legado y nuestra militancia es la de los compañeros del 70. Es decir, con el mismo compromiso de transformación de país, no por una circunstancia armada, sino porque estamos convencidos que desde la militancia y en un proyecto político que tiene una continuidad como este creemos que estamos trabajando por un país distinto”, sostuvo Nichajew.
Por otro lado, Álvaro Giménez, forma parte del espacio desde unos dos años. “La palabra militancia para mí abarca muchas cosas. Ser militante no es ir a sacarte la foto con un pibe del barrio en emergencia, ser militante empieza por la organización”, remarcó Gimenez.
Lea: "En la ciudad no te podés hacer el zonzo y creer el discurso demonizador sobre La Cámpora"
Punto seguido, agregó que la militancia pasa por “organizarte e ir con tus compañeros a hacer”. “Para aprender a ser solidarios no sólo con los de adentro del partido, sino con los de afuera”, aseveró, según publicó el diario La Calle.
Finalmente, Gimenez dio un pantallazo de lo que era la militancia en los 90, cuando su vida pasaba por la adolescencia y el colegio secundario. “En los 90 militábamos en los centros de estudiantes y la directora nos venía a preguntar qué hacíamos; y en nuestras casas teníamos que escondernos para hacer política porque lo veían como algo malo”, recordó.
“Hoy nuestros viejos nos acompañan y nosotros sabemos que utilizamos la política como herramienta de transformación y no hay otra explicación a esto”, aseguró.
Para Giménez, uno se da cuenta día a día “de que la construcción de la democracia se da a través de cosas como ésas”. “Yendo a los barrios y luchando por nuestros derechos”, concluyó. (Redacción de Babel)
La Cámpora uruguayense existe en la ciudad desde el 2010 cuando comenzaron a darse los primeros pasos. Ludmila Nichajew, vecina uruguayense, formó parte de los primeros integrantes y actualmente se desempeña como la referente de la agrupación que banca los trapos de la Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner.
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“Nosotros, hoy, llevamos un gran legado y nuestra militancia es la de los compañeros del 70. Es decir, con el mismo compromiso de transformación de país, no por una circunstancia armada, sino porque estamos convencidos que desde la militancia y en un proyecto político que tiene una continuidad como este creemos que estamos trabajando por un país distinto”, sostuvo Nichajew.
Por otro lado, Álvaro Giménez, forma parte del espacio desde unos dos años. “La palabra militancia para mí abarca muchas cosas. Ser militante no es ir a sacarte la foto con un pibe del barrio en emergencia, ser militante empieza por la organización”, remarcó Gimenez.
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Punto seguido, agregó que la militancia pasa por “organizarte e ir con tus compañeros a hacer”. “Para aprender a ser solidarios no sólo con los de adentro del partido, sino con los de afuera”, aseveró, según publicó el diario La Calle.
Finalmente, Gimenez dio un pantallazo de lo que era la militancia en los 90, cuando su vida pasaba por la adolescencia y el colegio secundario. “En los 90 militábamos en los centros de estudiantes y la directora nos venía a preguntar qué hacíamos; y en nuestras casas teníamos que escondernos para hacer política porque lo veían como algo malo”, recordó.
“Hoy nuestros viejos nos acompañan y nosotros sabemos que utilizamos la política como herramienta de transformación y no hay otra explicación a esto”, aseguró.
Para Giménez, uno se da cuenta día a día “de que la construcción de la democracia se da a través de cosas como ésas”. “Yendo a los barrios y luchando por nuestros derechos”, concluyó. (Redacción de Babel)
