Por Américo Schvartzman (PS)
"Lo que Lauritto no responde"
El anuncio de cierre de su oficina es un reconocimiento de que lo que venía haciendo es irregular. Sino ¿por qué cerrarla? Una propuesta: que el Gobierno Provincial instrumente un trámite vía internet para que cualquiera pueda ayudar a acceder al “subsidio para subsistencia” a quien lo necesite, sin depender de ningún dirigente, y tal como lo establece el artículo 24 de la Constitución Provincial.
22.09.2015 | 16:52
El ministro de Educación y candidato a intendente de Concepción del Uruguay por el FpV, José Eduardo Lauritto, respondió a la presentación del PS que lo acusó de distribuir subsidios irregularmente. Anunció que cerrará la oficina informal de calle 8 de Junio 460 (donde se tramitan los subsidios, y que funciona como su “bunker” de campaña). Según se informó, “si no es elegido intendente, la oficina seguirá abierta hasta el 10 de diciembre, y, en cambio, si lo eligen espera poder cumplir con las demandas”. No aclaró si desde el Municipio o desde 8 de Junio.
El anunciado cierre es un reconocimiento de que lo que venía haciendo “desde hace años” es irregular. De otro modo ¿por qué dejaría de hacerlo?
El ministro dijo que solo gestiona, que no otorga. Y agregó, justificándose: “Si Concepción del Uruguay tuviera los programas nacionales que no llegan a municipios menores a cien mil habitantes, si el (plan) 'Mejor Vivir' llegara, yo no estaría pidiendo subsidios para un techo que se llueve o un baño que dejó de funcionar”. No está claro si la velada crítica de Lauritto se dirige hacia el gobierno municipal porque no gestiona esos planes; o al gobierno nacional por no habilitarlos para ciudades como Concepción del Uruguay; o a Desarrollo Social (municipal o provincial) por no cumplir sus funciones. En cualquier caso, reconoce que si las cosas se hicieran bien, él no debería ser quien lo gestionara.
Por otro lado, el ministro no respondió ninguna de las preguntas que hicimos. Incluso sus aclaraciones sumaron nuevas inquietudes:
¿Por qué el Convenio 20 y las condiciones para acceder a estos subsidios no son información pública y siguen siendo una especie de “secreto de Estado”?
¿Por qué es el ministro de Educación el que se ocupa de algo que debería hacer Desarrollo Social de la Provincia o de la Municipalidad?
¿Por qué en la carta que entrega a los beneficiarios (donde “informa” y no “otorga”, según argumentó) no les informa quién otorga el subsidio?
¿Cuántos subsidios de este tipo se distribuyen en Concepción del Uruguay?
¿Con qué frecuencia los reciben los beneficiarios?
¿Quién define qué personas los reciben y con qué criterios?
¿A quién debe recurrir el vecino o la vecina que necesita asegurar su subsistencia?
Otra parte de la respuesta de Lauritto merece ser destacada: “Es cierto que hay que reflexionar cuando se dice esquema ‘clientelar’. En tiempos electorales esas cosas hay que expresarlas porque a veces hay desmadre y hay que aceptarlo. No tengo por qué negarme a este análisis”.
En ese sentido, me permito sugerir una propuesta concreta: que el Gobierno Provincial haga público el Convenio Nº20, e instrumente un trámite sencillo vía internet para que cualquier persona que requiera apoyo para la subsistencia, pueda gestionar el beneficio, sin necesidad de depender de ningún dirigente político. En otras palabras: que transforme esta dádiva en un derecho, dado que está consagrado en el artículo 24 de nuestra Constitución Provincial, desde 2008. Pero la Constitución dice que a eso debe hacerlo “un ente público con participación ciudadana”, y no el ministro Lauritto.
Es deseable que el ministro evalúe esta propuesta y la impulse antes de dejar su cargo, de manera que los muchos uruguayenses (y entrerrianos) que requieren asistencia –ante el evidente crecimiento de la pobreza y la indigencia que se ve en las calles cotidianamente–, puedan acceder a esos subsidios sin necesidad de un “padrino”.
Queda para el final, la pregunta que ni Lauritto ni ningún miembro del oficialismo pueden responder:
¿Por qué, en la Argentina del relato oficial, hay personas que necesitan subsidios de 1.500 pesos para subsistir?
*Periodista. Miembro de la conducción del PS Uruguay. Es uno de los firmantes de la presentación ante el procurador para que se investiguen los subsidios distribuidos por el ministro Lauritto.
El anunciado cierre es un reconocimiento de que lo que venía haciendo “desde hace años” es irregular. De otro modo ¿por qué dejaría de hacerlo?
El ministro dijo que solo gestiona, que no otorga. Y agregó, justificándose: “Si Concepción del Uruguay tuviera los programas nacionales que no llegan a municipios menores a cien mil habitantes, si el (plan) 'Mejor Vivir' llegara, yo no estaría pidiendo subsidios para un techo que se llueve o un baño que dejó de funcionar”. No está claro si la velada crítica de Lauritto se dirige hacia el gobierno municipal porque no gestiona esos planes; o al gobierno nacional por no habilitarlos para ciudades como Concepción del Uruguay; o a Desarrollo Social (municipal o provincial) por no cumplir sus funciones. En cualquier caso, reconoce que si las cosas se hicieran bien, él no debería ser quien lo gestionara.
Por otro lado, el ministro no respondió ninguna de las preguntas que hicimos. Incluso sus aclaraciones sumaron nuevas inquietudes:
¿Por qué el Convenio 20 y las condiciones para acceder a estos subsidios no son información pública y siguen siendo una especie de “secreto de Estado”?
¿Por qué es el ministro de Educación el que se ocupa de algo que debería hacer Desarrollo Social de la Provincia o de la Municipalidad?
¿Por qué en la carta que entrega a los beneficiarios (donde “informa” y no “otorga”, según argumentó) no les informa quién otorga el subsidio?
¿Cuántos subsidios de este tipo se distribuyen en Concepción del Uruguay?
¿Con qué frecuencia los reciben los beneficiarios?
¿Quién define qué personas los reciben y con qué criterios?
¿A quién debe recurrir el vecino o la vecina que necesita asegurar su subsistencia?
Otra parte de la respuesta de Lauritto merece ser destacada: “Es cierto que hay que reflexionar cuando se dice esquema ‘clientelar’. En tiempos electorales esas cosas hay que expresarlas porque a veces hay desmadre y hay que aceptarlo. No tengo por qué negarme a este análisis”.
En ese sentido, me permito sugerir una propuesta concreta: que el Gobierno Provincial haga público el Convenio Nº20, e instrumente un trámite sencillo vía internet para que cualquier persona que requiera apoyo para la subsistencia, pueda gestionar el beneficio, sin necesidad de depender de ningún dirigente político. En otras palabras: que transforme esta dádiva en un derecho, dado que está consagrado en el artículo 24 de nuestra Constitución Provincial, desde 2008. Pero la Constitución dice que a eso debe hacerlo “un ente público con participación ciudadana”, y no el ministro Lauritto.
Es deseable que el ministro evalúe esta propuesta y la impulse antes de dejar su cargo, de manera que los muchos uruguayenses (y entrerrianos) que requieren asistencia –ante el evidente crecimiento de la pobreza y la indigencia que se ve en las calles cotidianamente–, puedan acceder a esos subsidios sin necesidad de un “padrino”.
Queda para el final, la pregunta que ni Lauritto ni ningún miembro del oficialismo pueden responder:
¿Por qué, en la Argentina del relato oficial, hay personas que necesitan subsidios de 1.500 pesos para subsistir?
*Periodista. Miembro de la conducción del PS Uruguay. Es uno de los firmantes de la presentación ante el procurador para que se investiguen los subsidios distribuidos por el ministro Lauritto.